El lunes, junto con Juan Corro, jefe de gabinete del Secretario de Estado de Telecomunicaciones y Sociedad de la información, Gema Díaz Real, Presidenta de la CEOE Cantabria y Pedro Bárcena, Presidente de ASCENTIC, estuvimos, presentando a los empresarios, amigos y compañeros de profesión cántabros, la Agenda Digital para España. En un par de ocasiones he escrito sobre ello, sobre la Estrategia del Gobierno de España para el desarrollo de la Economía y la Sociedad digital de nuestro país.
Dado que la Ley General de Telecomunicaciones, va avanzando y que para el de verano se presentará, haré un par de entradas sobre la misma.
La futura LGT, se presentará en unos meses para su debate en el Congreso. Así está marcado en el amplio abanico de reformas estructurales marcadas por este gobierno.
El objetivo es tener unas buenas autovías para la circulación de los datos, y que los usuarios vean mejoras en cuanto a la velocidad en internet, cobertura, reduccion de precios, y más seguridad en cuanto a la protección de datos.
Las principales novedades que presenta el anteproyecto son:
– Recupera la unidad de mercado en materia de telecomunicaciones estableciendo procedimientos de coordinación y resolución de conflictos entre las diferenes administraciones, permitiendo agilizar el despliegue de redes y la prestación de servicios.
– En línea con el punto anterior, eliminación de trabas administrativas impuestas por las diferentes administraciones.
– Introduce medidas que permiten el acceso a las redes de operadores de otros sectores como el del gas, la electricidad o el transporte en condiciones equitativas, no discriminatorias, neutrales y orientadas a costes. Medidas alineadas con las propuestas de la Comisión Europea en la Guía de la Unión Europea para las inversiones en Banda Ancha de Septiembre de 2011.
Impacto en la economía
El sector de las telecomunicaciones alcanzó en 2011 una facturación de 37.950 millones de euros, lo que representa un 3,5% del Producto Interior Bruto (PIB). Su inversión en ese período superó los 5.919 millones de euros. Además, el sector da empleo directo a 74.824 trabajadores.
Existe una necesidad de inversión en Europa de más de 200.000 millones de euros y en España de unos 25.000 millones para que todos los hogares dispongan de banda ancha de aquí a 2020.
Según estudios de la Comisión Europea por cada aumento de la penetración de la banda ancha en un 10%, el crecimiento del PIB es entre 1% -1,5%.
Por último, se esperan más de 100.000 empleos en la UE-27 entre 2010 y 2015 y de 2 millones de empleos en 2020 asociados a la innovación en servicios.